BIENVENID@S A MI RINCONCILLO

Un rinconcillo abandonado por años pero que guardo con mucho cariño. ¿ Podremos quitarle las telarañas de a poquitos?
Reciclando, trasteando y curioseando.
Vamos a ver qué sale.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Antes y después de una tabla de lavar

Antes de nada, deciros, que tuve esta tabla muchos años guardada en un armario esperando saber qué hacer con ella y cómo arreglarla. De hecho fue la primera restauración que hice, incluso creo que fue de las primeras manualidades que tuve entre manos.
Un día colocando armarios me topé de nuevo con ella y me dí cuenta de que estaba bastante más apolillada y carcomida que al principio y me lancé a restaurarla para evitar que se terminara de estropear. He de confesar que no tenía ni idea de cómo hacerlo, pero buscando en revistas, libros, (aún no había descubierto todo lo que se puede llegar a aprender por internet), dí más o menos con la forma.



Lo primero fué quitarle todo el polvo que tenía acumulado y darle un producto especial para carcoma. Y después lijarla. Recuerdo que al lijarla aún se desprendía el olor del jabón hecho en casa, una pasada, teniendo en cuenta la cantidad de tiempo que llevaría sin usarse.



Como veis estaba también rota y las piezas se movían. Y como tampoco sabía muy bien cómo quedaría mejor, si manteniendo esa gran grieta o restaurándola ,me decidí por lo segundo para probar.Encolé las piezas y tapé todos los agujeros de carcoma con pasta para madera y la grieta con masa de modelar, ( un caos para darle forma).
Le dí un tinte de roble claro porque el color que tenía no me gustaba mucho. Y en la grieta ayudándome de acrílicos imité las vetas de la madera pues se notaba bastante la unión. Tenía que haberle puesto un taco de madera en vez de la pasta pero eso lo he aprendido después.
Y después de patinarla y barnizarla este es el resultado final.



 Completamente distinta a como estaba, ¿verdad? . Aún se notan los agujeritos de la carcoma, los golpes y sobre todo lo desgastada y usada que estaba. Se supone que los agujeritos había que taparlos del todo pero no hubo manera. Aún así, todavía me sigue gustando mucho el resultado , pues no se trataba de dejarla como nueva, sino de mantenerla y no dejar que se estropeara, dejando ver "las arrugas del tiempo".



Espero que a vosotros también os guste.
Por cierto, aún sigue en un armario, esperando ocupar su rincón ideal. Llegará su momento.
Un saludo a tod@s

1 comentario:

Un Rincón Escondido dijo...

Espero que lo pongas en un lugar estupendo, está magnifica, te felicito, Antonia